Cómo mantenerse correctamente hidratado durante los entrenamientos
Es esencial mantenerse hidratado durante los entrenamientos para lograr un rendimiento y una recuperación óptimos. El agua regula la temperatura corporal, lubrica las articulaciones y ayuda a transportar los nutrientes para que tengas energía y te puedas mantener saludable. Beber agua antes, durante y después del entrenamiento suele ser suficiente para el ejercicio ligero a moderado. Primero, bebe un vaso de agua unos 30 minutos antes de la sesión y bebe a sorbos a lo largo del entrenamiento, sobre todo si sudas mucho.
Si haces entrenamientos más intensos o largos, considera la posibilidad de consumir una bebida electrolítica para reponer las sales y minerales perdidos. Monitorear el color de la orina es una forma sencilla de calibrar la hidratación: si es de color amarillo pálido, suele indicar una buena hidratación. No olvides que las necesidades de hidratación de cada persona varían, por eso debes estar atento a tu cuerpo y ajustar tu ingesta de líquidos en consecuencia para mantenerte correctamente hidratado durante cada entrenamiento.