¿Por qué estoy en una meseta de ejercicio?
Cuando comienzas a hacer ejercicio por primera vez, es posible que veas mucho progreso en un corto período de tiempo. Esto ocurre porque tu cuerpo se está adaptando a los nuevos estímulos estresantes a los que está expuesto, como levantar pesas más pesadas o correr distancias más largas.
Con el tiempo, a medida que tu cuerpo se adapta al ejercicio que estás haciendo, comenzarás a ver que tu progreso se ralentiza. Si bien esta es una progresión natural, hay formas de comenzar a ver mayores recompensas nuevamente.
Una meseta de ejercicio ocurre por diferentes razones. Las razones más comunes incluyen descanso y tiempo de recuperación inadecuados, así como hacer la misma rutina una y otra vez. Si quieres superar una meseta en tu ejercicio, asegúrate de cambiar tu rutina periódicamente para que tus músculos hagan diferentes esfuerzos. Introduce nuevos ejercicios y cambia los que ya no se ajusten a tus objetivos de acondicionamiento físico. Además, asegúrate de tomarte un tiempo para descansar y recuperarte, con el fin de promover la reparación muscular y evitar lesiones.