Cinco consejos para mantener la actividad cuando la vida te toma por sorpresa

Cinco consejos para mantener la actividad cuando la vida te toma por sorpresa

La vida es imprevisible. Tal vez tengas un plan detallado de lo que quieres conseguir, o un estricto programa de entrenamiento que satisfaces pase lo que pase.

Pero, de repente, en la vida ocurre algo inesperado.

Todo el mundo experimentará esto en algún momento de su vida. Tal vez tu hijo tiene un resfriado, estás lidiando con una lesión molesta o el auto no arranca.

Todos tenemos distintos desafíos, pero te damos nuestros mejores consejos para lidiar con al menos un aspecto cuando la vida te sorprende.

Gestión del tiempo

Si ahora tienes más trabajo, es posible que debas que reevaluar tus métodos de gestión del tiempo. Si te sientes abrumado al final de un largo día laboral, analiza cómo puedes preparar tus noches con antelación. Eso podría implicar preparar comidas durante el fin de semana. Tendrás más tiempo para hacer un entrenamiento rápido y tener una comida lista después sin tener que dedicar tiempo adicional a ponerte a cocinar esa misma noche. Si la hora que dedicas a ti no te causa mucha felicidad, considera hacer cambios y participar en una clase de yoga semanal después del trabajo.

Mejorar la gestión del tiempo y priorizar tu bienestar puede resultar en que tengas más tiempo para ejercitar y mantenerte activo durante este tiempo tan ajetreado de tu vida.

Levántate más temprano

Es posible que tengas que cambiar tu rutina si ocurre un imprevisto. Esto puede implicar levantarse más temprano para realizar alguna actividad antes del trabajo. Programa el despertador para que suene más temprano de lo habitual y tener más tiempo para hacer ejercicio y prepararte para el trabajo. Obviamente, no querrás llegar al trabajo demasiado cansado, así que intenta organizar una buena rutina nocturna. Acuéstate una hora antes para no comprometer tu hábito de sueño.

Entrenamiento más intenso

Cuando tu situación cambie, tal vez debas cambiar tu forma de hacer ejercicio. Si solías tener una hora completa para entrenar antes, tal vez ahora solo tengas 30 minutos. Si tal caso, aumenta la intensidad de tus entrenamientos para que puedas sentirte satisfecho con los entrenamientos que puedas completar.

Enfócate en incrementar tu ritmo cardíaco y el flujo sanguíneo a tus músculos. Incluso si tienes menos tiempo, entrenar a intervalos de alta intensidad, como los sprints o el entrenamiento Tabata, harán que puedas lograr muy buenos resultados.

Incluso si es solamente una sesión rápida de 15 minutos muy intensa, siempre es mejor hacer algo que no hacer nada.

Entrenamiento en casa

Si ya no puedes ir al gimnasio local, intenta hacer ejercicio desde casa. Puedes ser fácil entrenar con pocos equipos en casa. Intenta seguir un video de entrenamiento en línea en la sala de estar de tu casa o incluso al aire libre. Si no tienes pesas en tu casa, puedes limitarte a realizar ejercicios con el peso del cuerpo o centrarte en el movimiento consciente al practicar yoga o pilates.

Camina cuando puedas

Una buena manera de asegurarte de que puedes seguir realizando tu actividad diaria es caminar siempre que puedas hacerlo. Si generalmente vas a trabajar en auto, ¡camina! O, si tu lugar de trabajo está demasiado lejos para ir caminando, intenta ir en bicicleta o simplemente estaciona el auto más lejos. Al tomar el recreo para comer, sal a pasear al aire libre mientras disfrutas de tu comida. Las pequeñas actividades a lo largo del día se irán sumando, incluso cuando la vida te haya dado una sorpresa.