Trucos para aprovechar las sobras

Trucos para aprovechar las sobras

¿Te ha sobrado mucha comida de la cena? En vez de desecharlos, ¿por qué no encontrar formas interesantes de utilizarlos?

Al utilizar las sobras, se minimizan los residuos, lo que beneficia al medio ambiente y te permite llevar un estilo de vida más sostenible. También te ayuda a ahorrar en la factura del supermercado porque no tendrás que comprar tantos ingredientes nuevos para comidas en el futuro.

Aquí tienes algunos trucos para aprovechar las sobras.

Congela las sobras

Si te sobraron una o dos raciones de la cena, no las deseches. En cambio, congela las sobras para tenerlas listas para comer otro día.

También puedes guardarlas en el refrigerador y consumirlas al otro día. Si puedes, utiliza recipientes de cristal transparente para que puedas ver fácilmente la comida que te ha sobrado. A nadie le gusta encontrar en el refrigerador un recipiente que tiene comida que habías olvidado y que ya ha caducado. También puedes utilizar notas adhesivas para etiquetar la comida.

Crea platillos con los mismos ingredientes

Después de cocinar una comida, si te sobran ingredientes, utilízalos para crear otro platillo. Por ejemplo, si hiciste chili y te ha sobrado carne picada, úsala para hacer tacos de carne picante al día siguiente. Si cocinaste demasiado tofu para tu salteado, guárdalo para una ensalada que puede preparar al día siguiente. El punto es ser creativo y pensar en formas innovadoras de combinar los ingredientes.

Las verduras son ingredientes muy versátiles y se pueden aprovechar fácilmente si te sobran. Puedes agregarlas a casi cualquier plato (como sopas, curry, pasta, pizza, quiche y salteados) e incluso combinarlas con frutas para crear batidos y smoothies saludables.

Utiliza el pan que haya quedado duro

Cuando el pan empieza a quedar duro, lo primero que se nos ocurre es desecharlo y comprar otro. Pero, ¡piénsalo antes de hacerlo! El pan que ha quedado duro se puede usar para hacer pan rallado, que puedes usar para empanizar el pollo, pavo o tofu.

El pan que ha quedado duro también se puede utilizar para hacer panecillos crujientes o bruschetta para disfrutar como parte de cualquier comida. Asimismo, puedes congelar el pan cuando se ponga duro para conservarlo y utilizarlo más adelante.

Reutiliza tu pasta

Solemos cocinar demasiada pasta, pero no tienes por qué tirarla si te sobra después de cenar. En cambio, guárdala en el refrigerador para reutilizarla al día siguiente para hacer una sopa o ensalada de pasta. La pasta es un ingrediente muy versátil que sabe muy bien con casi cualquier carne (o alternativa a la carne), verdura y salsa. La pasta también se puede congelar y te durará entre tres y seis meses.