¿Qué son los antioxidantes y por qué importan?
Los antioxidantes son moléculas que desempeñan una función indispensable en la protección de las células frente al daño oxidativo causado por los radicales libres de oxígeno, que se producen en los procesos metabólicos de nuestro organismo y en fuentes externas, como la contaminación, la radiación y las sustancias químicas.
El proceso de daño oxidativo ocurre cuando los radicales libres interactúan con componentes celulares significativos, como el ADN, las proteínas y los lípidos, y los dañan. Este daño puede causar distintos problemas de salud y está relacionado con varias enfermedades crónicas, como las cardiovasculares, el cáncer, la diabetes y los trastornos neurodegenerativos.
Los antioxidantes neutralizan los radicales libres donándoles un electrón, estabilizándolos y evitando que sigan dañando las células. Algunos antioxidantes conocidos son las vitaminas C y E, el betacaroteno, el selenio y distintos fitoquímicos presentes en frutas, verduras y otros alimentos vegetales.
Aquí te explicamos por qué los antioxidantes son importantes para el organismo:
- Protección de las células contra el daño oxidativo, lo cual reduce el riesgo de mutaciones en el ADN y los cánceres resultantes
- Reducción del riesgo de enfermedades crónicas, que incluye las cardiopatías, el cáncer y la diabetes
- Apoyo al sistema inmunitario debido a la disminución del daño oxidativo en las células y el ADN
- Salud de la piel, ya que los antioxidantes protegen la piel de los daños causados por los rayos UV que podrían provocar mutaciones en el ADN y contribuir al envejecimiento
- Mejora de la función cognitiva y reducción del riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson
¿Dónde se pueden encontrar antioxidantes?
En ciertos tipos de alimentos, en particular las frutas y verduras, los antioxidantes abundan. Para consumir una cantidad adecuada de antioxidantes, debes incluir una gran variedad de frutas y verduras diferentes en tu dieta, como manzanas, plátanos, bayas, melones, verduras de hoja verde, zanahorias, pimientos, remolachas y patatas.